Blog gratis
Reportar
Editar
¡Crea tu blog!
Compartir
¡Sorpréndeme!
todos me dicen
si te dicen que caí... es verdad
08 de Febrero, 2010    gente

Virginia y Tony

Curro contemplaba a aquella pareja tan bella, tan perfecta, como si estuviera presenciando el estreno de una de esas películas de amor de los años 20 con Rodolfo Valentino, esas que tanto le gustaron siempre pero que Elena odiaba hasta el punto de que él había dejado de mirarlas. Ahora, tal vez como una venganza premeditada del destino por su deserción, le estaba siendo infiel a su novia contemplando el romance entre esa chica -que no podía menos que ser modelo: tan alta, tan linda, con esos pechos tan pulposos que bordearían la desproporción si no fuera porque el resto de su cuerpo también estaba dotado de curvas vertiginosas- y ese joven tan apuesto, tan robusto, tan bien peinado y tan bien vestido, deportista a buen seguro, y a buen seguro excelso amante.

Lo que no sabía es que esa pareja no era tan perfecta como parecía en aquel momento. De la misma forma que le exasperaba la actitud machista y casquivana de los personajes de Valentino, y la falta de autoestima de sus ocasionales partenaires, que todo se lo consentían y perdonaban hasta el límite del maltrato, Curro no era capaz de percibir esos mismos síntomas en el trasfondo de la relación que tenía ante sus narices. De hecho, Virginia y Tony estaban dando en ese vagón su último manotazo de ahogado juntos, el intento postrero por salvar un vínculo ya irreconciliable –aunque ellos no lo sabían- porque no se puede recomponer lo que nunca se rompió, sino que se fue desgastando paso a paso y casi imperceptiblemente.

Por eso, en aquel momento, se deshacían en atenciones el uno al otro. Ella, reprimiendo su actitud maternal que tanto molestaba a Tony y acompañando con su sonrisa –pero mirada de no entiendo- la conversación sobre los temas que a él le interesaban. El, esforzándose por verbalizar todo su amor por Virginia que nunca se había atrevido a exhibir en público, ni aun en la intimidad, salía disparado hacia la cafetería del tren cada vez que a ella le daba un poco de sed o de hambre para traerle lo que fuera. Aunque Curro tenía fundadas sospechas de que el atleta aprovechaba esas incursiones para obsequiarse con un buen lingotazo de whisky.

Palabras claves , ,
publicado por gabardo a las 08:46 · Sin comentarios  ·  Recomendar
 
Más sobre este tema ·  Participar
Comentarios (0) ·  Enviar comentario
Enviar comentario

Nombre:

E-Mail (no será publicado):

Sitio Web (opcional):

Recordar mis datos.
Escriba el código que visualiza en la imagen Escriba el código [Regenerar]:
Formato de texto permitido: <b>Negrita</b>, <i>Cursiva</i>, <u>Subrayado</u>,
<li>· Lista</li>
SOBRE MÍ
FOTO

Paco del Pino

Operario de la información y guerrillero de las letras.
Actualmente -como desde hace una década, ya ven- me desempeño en el diario Primera Edición, de Misiones (Argentina).
Co autor del libro "Sobre esta piedra", la biografía no oficial de Fernando Lugo antes de convertirse en Presidente de Paraguay y en Padre de la Patria y de sus múltiples bastardos.
Contacto: gabardo01@hotmail.com

» Ver perfil

CALENDARIO
Ver mes anterior Mayo 2024 Ver mes siguiente
DOLUMAMIJUVISA
1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031
BUSCADOR
Blog   Web
TÓPICOS
» actualidad (7)
» agenda (3)
» auto marketing (2)
» ciudad (5)
» colateral (0)
» General (2)
» gente (9)
» letras sueltas (1)
» recomendados (2)
» reflexiones (15)
NUBE DE TAGS  [?]
SECCIONES
» Inicio
ENLACES
FULLServices Network | Crear blog | Privacidad